Páginas

La BODA es TEATRO.
El punto de partida es simple, un grupo de personas son convocadas a participar en una fiesta de bodas.
Pero, al poco de andar esta celebración, surge un pequeño inconveniente...
No están los novios.
Así es que estas mujeres y hombres vestidos con sus mejores galas para la ocasión, quedan perplejos intentando que algo suceda.
¿Qué es lo que sucede entre estas personas? TEATRO.
Y mientras un mozo desconcertado se pasea por el salón con su bandeja llena de copas de burbujeante champagne, preguntando ¿Usted es el novio? ¿Usted es la novia?...
A los invitados tan sólo les queda intentar representar esta pieza incompleta...esta pieza en la cual faltan los protagonistas.
Así, poco a poco cada uno va contando algo de si, algo que de algún modo tiene relación con la boda, el casamiento...
Alguien nos cuenta su soltería, otro las peleas de sus padres, otra el día aquel en que le pidieron casamiento...
Todo se hace teatro y ¿qué más teatral que los ritos de representación que en una fiesta de casamiento se suceden?
Si no ¿qué es tirar el ramo, la liga o la cintita de la torta?
Si, son simples representaciones que vuelven a escena una y otra vez que alguien dice "Si quiero"
Y si Bertolt Brecht en una de sus obras hace decir a un personaje..."Se acabó el teatro y comienza la realidad"
Para nosotros hacedores de este espectáculo...La Realidad es nuestro TEATRO.
La Boda de Brecht sirvió al grupo de trabajo como territorio de preguntas y estallido ¿Qué nos contaba a nosotros hoy esta obra escrita en un contexto histórico tan disímil? Hoy el matrimonio es una institución cuestionada que busca su manera de adaptarse a la época.

Las preguntas sencillas sobre nuestra historia personal en relación al tema convocante fueron gestando un material humano, rico en vivencias, que nos atrajo y que comenzamos a acumular. El proceso dejó al descubierto distintas texturas verbales, modos, giros en el decir, como también diferentes versiones sobre una misma historia, perspectivas que dan cuenta del espíritu de multiplicidad y polisemia en el tiempo que vivimos.

A partir de esto nos abocamos a los rituales de representación; una boda está constituida por una serie de hitos perfectamente pautados, y ese conjunto perfectamente instrumentado también es una representación… la dramaturgia condujo al director a ver la posibilidad de establecer puentes y cruces entre planos de distintas realidades, a saber: la realidad de la boda, la realidad de los relatos personales de los actores, la realidad de los personajes.

Así se genera un constante devenir de los vínculos que hace que la dinámica de los sexos desarrolle el permanente vaivén lúdico entre las relaciones. Buscando, en la mecánica del juego, una puerta hacia la verdad desnuda del adulto.

"Ahora se acabó el teatro y comienza la realidad" dice un personaje en el texto de Brecht… Y así esta paradoja deviene acción e impulsan nuestro proyecto.
  • ¿Cuál es el límite de la ficción?
  • ¿Es cierto lo que en una boda sucede?
  • ¿Alguien cree en el “Sí quiero”?
  • Todas esas caras sonrientes ¿sonríen o son muecas de actor?
Porque las palabras piden cuerpos en escena para tentar respuestas, es que aquí se hace tiempo presente LA BODA ES TEATRO.
Dirección y Dramaturgia
Walter Rosenzwit

Vestuario y Escenografía
Alejandro Mateo


Elenco

  • Verónica Amézola
  • Paula Carreira
  • María Laura Dorna
  • Karina García
  • Nicolás Milanesi
  • Pablo Pagador
  • Germán Rodríguez Estráviz
  • Hugo Velez